viernes, 5 de junio de 2009

*/ Una historia para pensar /


Cuando la conocí tenía 16 años. Fuimos presentados en una fiesta por un "CHICO" que decía ser mi amigo. Fue amor a primera vista. Ella me enloquecía. Nuestro amor llegó a un punto, que ya no conseguía vivir sin ella. Pero era un amor prohibido. Mis padres no la aceptaron.
Fui expulsado del colegio y empezamos a encontrarnos a escondidas. Pero ahí no aguanté mas, me volví loco. Yo la quería, pero no la tenía. Yo no podía permitir que me apartaran de ella. Yo la amaba: destrocé mi coche, rompí todo dentro de casa y casi maté a mi hermana. Estaba loco, la necesitaba.Hoy tengo 39 años; estoy internado en un hospital, soy inútil y voy a morir abandonado por mis padres, por mis amigos y por ella.
¿Su nombre? Se llama Cocaína. A ella le debo mi amor, mi vida, mi destrucción y mi muerte

No hay comentarios:

Publicar un comentario